“Ernesto Che Guevara: Inspiración de Congruencia para la Izquierda Mexicana”

Ernesto “Che” Guevara ha sido, desde su muerte, una figura emblemática en la política y la historia latinoamericana. Su imagen, asociada a la lucha revolucionaria, ha trascendido fronteras y generaciones, consolidándose como un símbolo de resistencia y cambio social. Para muchos, el Che es la encarnación de los ideales de justicia y equidad, un referente para movimientos que buscan romper con las estructuras de poder opresivas. Es bajo esta luz que el Diputado Federal José Luis Sánchez González, del Partido del Trabajo, ha destacado al Che como “un símbolo de la congruencia”, aludiendo no solo a sus ideales, sino también a la coherencia con la que vivió su vida.

El concepto de “congruencia” en política se refiere a la alineación entre el discurso y las acciones. En el caso del Che, su vida es un testimonio de la profunda integración de sus principios con su práctica diaria. No fue solo un teórico de la revolución; vivió y murió por las ideas que defendía. Desde sus inicios como médico en la Argentina hasta su participación decisiva en la Revolución Cubana, y más tarde en la lucha guerrillera en África y Bolivia, Guevara mantuvo una coherencia inquebrantable entre lo que decía y lo que hacía.

Para Sánchez González, este es un rasgo que muchos políticos contemporáneos podrían aprender. En tiempos donde la política a menudo parece marcada por la incoherencia, las promesas incumplidas y los intereses personales, figuras como el Che Guevara representan un modelo distinto. Se trata de la política como servicio, de la entrega absoluta a una causa mayor que el propio beneficio. Es esa congruencia lo que, según el Diputado, hace del Che una figura aún vigente, cuyo legado no es solo el de un revolucionario, sino el de un hombre profundamente comprometido con la justicia social.

Por supuesto, no todos comparten esta visión romántica del Che. Su ideología marxista-leninista son objeto de críticas y divisiones. Sin embargo, la perspectiva de Sánchez González no busca idealizar al personaje, sino poner en relieve la importancia de la coherencia en la vida pública. En un momento en que la política global enfrenta una crisis de credibilidad, recordar al Che como un ejemplo de congruencia puede servir como una invitación a los líderes actuales a reconsiderar sus propias acciones y compromisos.

Así, al mencionar a Ernesto Che Guevara como símbolo de congruencia, el Diputado del PT apela a un ideal que trasciende la figura histórica y se instala como una lección para el presente: que los ideales, cuando son genuinos, deben vivirse con total convicción, sin titubeos ni concesiones. Es una invitación a pensar en la política como un acto de integridad, donde el fin no justifica los medios, sino que el camino debe ser tan ético como el objetivo final.

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Lic. Leonor Vázquez Valeriano